Si alguna vez ha pasado tiempo en una sauna, sabrá lo reconfortante que puede ser el calor en la piel. En la época romana antigua, la gente usaba el poder del calor para limpiar; aproveche las propiedades del vapor para purificar sus poros y mantener su cutis libre de imperfecciones. Esta técnica sigue formando parte de los regímenes de belleza modernos en la actualidad.
¿Qué es el vapor facial?
Alrededor de 110 grados, la temperatura del vapor hace que el cuerpo produzca sudor. Este sudor contiene impurezas de la piel, que de otro modo podrían causar espinillas y acné. Si tiene acné crónico, rociarse la cara puede ser una excelente manera de aclarar su piel rápidamente.
Esta técnica de belleza se puede realizar en casa, con un cuenco grande, una tetera y un paño de cocina. Si bien las limpiezas con vapor profesionales son un procedimiento común en el salón, pueden ser costosas y es útil saber cómo hacer las tuyas propias.
¿Cuáles son los beneficios del tratamiento facial con vapor?
Como se explicó, el vapor abre los poros y permite que la suciedad y las bacterias se escapen de la piel. Esto evita que el aceite, la suciedad y los desechos se conviertan en espinillas desagradables, bloqueos cutáneos y acné crónico. Los beneficios del alisado facial para pieles propensas al acné son numerosos, porque la técnica de belleza también rehidrata y revitaliza la tez.
¿Cómo alivia el vapor facial los síntomas del acné?
La causa del acné son las bacterias y la suciedad debajo de la piel, que se acumulan y evitan que los poros respiren. Con el uso de vapor facial, estos poros se pueden abrir y desbloquear. De hecho, el vapor es excelente cuando se trata de limpiar y destruir las bacterias y los nódulos del acné que causan problemas a quienes lo padecen.
¿Con qué frecuencia debo rociar mi piel?
Si bien el vapor facial puede ser una forma eficaz de tratar el acné crónico, es importante no exagerar. Los aceites que obstruyen los poros no son intrínsecamente dañinos, ya que su función principal es mantener la piel lubricada y protegida. Sin estos aceites, la piel puede agrietarse y doler.
Sin embargo, una sobreabundancia de estos aceites es lo que conduce al acné, por lo que la clave es lograr un equilibrio saludable. Es por eso que no debes vaporizar tu rostro con demasiada frecuencia, para evitar despojar la piel de sus aceites protectores. En algunos casos, cocinar al vapor con demasiada frecuencia puede resultar incluso en una piel grasa, ya que los poros producen grasa adicional para compensar la pérdida. La regla general es no limpiar con vapor más de tres veces por semana.
¿Cuál es la forma correcta de limpiar la piel con vapor?
Primera etapa
Llene un recipiente grande con agua hirviendo, teniendo cuidado de no quemarse las manos o la cara.
Segundo paso
Coloque su cabeza por encima del agua (al menos 12-18 pulgadas). Si es necesario, coloque una toalla sobre su cabeza para atrapar el vapor, pero no mantenga la cara fuera del agua si la sensación es incómoda.
Tercer paso
Siempre que la sensación sea cómoda, mantenga la cara fuera del agua durante 10 a 15 minutos. Puede usar un limpiador o humectante para el acné para una purificación adicional una vez que haya terminado de vaporizar.
Para obtener beneficios adicionales de limpieza de los poros, ponga 1 gota de aceite de menta en agua hirviendo.