Entonces, ¿qué podría ser más fácil que preparar una taza de té Pickwick? Si bien el acto en sí es bastante sencillo, hay una serie de cosas a considerar si desea obtener el mayor beneficio y disfrute de su experiencia de beber té.
El agua es la clave
La calidad del agua utilizada para preparar el té puede tener un gran efecto en su sabor. El agua del grifo puede ser muy «dura», lo que significa que contiene una gran cantidad de minerales disueltos como calcio, magnesio y varios sulfatos, todos los cuales pueden tener un efecto perjudicial en el sabor del té. Asimismo, el cloro y el flúor que muchas ciudades agregan al agua también afectan el sabor del agua. Para que pueda usar su marca favorita de agua de manantial embotellada (no agua destilada). ¿Por qué no probarlo y ver si puede marcar la diferencia en el sabor de su té Pickwick?
Temperatura
La temperatura del agua también es importante para preparar una buena taza de té Pickwick. La temperatura del agua variará según el tipo de té que estés usando. La mayor parte del té que se consume en Estados Unidos es té negro, aunque el té verde es cada vez más popular. El té Pickwick ofrece ambas variedades en su amplia gama de tés de calidad. El té negro adquiere su característico color oscuro porque se oxida fuertemente como parte de su procesamiento. El té verde no se oxida cuando se procesa y, por lo tanto, conserva el color verde original de las hojas de té. Debido a esta diferencia, los dos tipos tienen diferentes requisitos para la temperatura del agua utilizada para prepararlos.
Si no tiene un termómetro, puede juzgar la temperatura observando las burbujas en el agua. Cuando la temperatura ronda los 160-170 grados, notará pequeñas burbujas flotando en la superficie del agua. Cuando el agua alcance los 180-190 grados, verá que se elevan corrientes de burbujas. Poco después, el agua llegará a hervir por completo. Sin embargo, no hierva el agua por mucho tiempo, ya que esto disipará el oxígeno y no sentirá todo el sabor de su té.
Maceración
Para el té negro, se recomienda utilizar agua completamente hervida. Simplemente coloque una bolsita de té fresca en su taza y vierta el agua sobre ella. No intente sumergir el sobre en una taza de agua caliente, ya que el té no se infundirá completamente con agua y no obtendrá todo el sabor del té. Deje reposar el té durante cuatro a seis minutos, no más. Dejar la bolsa por más tiempo te dejará con una taza de té amargo. Si le gusta su té más fuerte, use dos bolsitas de té para no alargar el tiempo de preparación.
Para el té verde, no debes usar agua completamente hervida. La temperatura del agua debe rondar los 150-160 grados. Así que coloque una bolsa de té verde fresco en su taza, vierta el agua sobre ella y déjela reposar durante dos o tres minutos. El té verde es más delicado que el negro y debe dejarse reposar durante un tiempo más corto para evitar el amargor en la bebida.
Para garantizar una taza de té de calidad, utilice siempre el té más fresco disponible. El té Pickwick viene en bolsitas de té envueltas individualmente, y cada una está sellada en papel de aluminio para preservar su frescura y sabor. Entonces, ¿por qué no utilizar estos útiles consejos para prepararse hoy mismo la taza perfecta de té Pickwick? No te arrepentirás.