¿Alguna vez ha hecho un viaje y el resultado fue una dirección que no había planeado? En el libro «Three Cups of Tea» escrito por Greg Mortenson y David Oliver Relin, la historia de un viaje de montañismo convertido en misión humanitaria tiene lugar después de que Greg toma un camino equivocado hacia un territorio inexplorado. Los resultados cambiaron su vida y la vida de las personas que conoció.
Greg Mortenson había iniciado un viaje de montañismo en un país extranjero. Dio un giro equivocado y se separó de su guía. Después de sobrevivir a los elementos, se dirigió a una pequeña aldea que no recordaba haber visto en ningún mapa. Fue en territorio islámico. La gente de allí lo recibió y lo cuidó. Al conocerlo, dijeron que necesitaban desesperadamente escuelas para sus hijos. No tenían edificios, maestros ni suministros.
A medida que Greg llegó a amar a las personas, se comprometió a encontrar una manera de ayudarlas. Cuando llegó a casa, empezó a intentar recaudar fondos. Envió cientos de cartas sin respuesta. Los primeros en responder con apoyo financiero fueron otros escaladores. Pueden ser personas decididas que creen que todo es posible.
Gran parte de la historia tiene momentos intensos, pero hubo un incidente humorístico que rompió el hielo y nos hizo reír de nosotros mismos. Greg había recibido un mensaje de una viuda anciana que le decía que quería hacer una gran donación, pero que tendría que ir a verla para recibirla. Pensó que con su edad sería inofensivo, así que se fue. Cuando llegó, tenía planeados tres días de actividades para los dos. Comenzó a parecer sospechoso cuando una de las actividades fue un masaje para los dos. Se despertó a la mañana siguiente con la mujer parada frente al sofá con un camisón transparente. Resultó que solo era una anciana solitaria que quería compañía. No hubo donación. Aprendió la lección y utilizó un mejor juicio después.
La intensidad se intensificó el 11 de septiembre de 2001 con el bombardeo de Nueva York. Esa mañana iba a tener una ceremonia de dedicación para su escuela recién construida. La gente lo despertaba contándole lo sucedido en su país. Expresaron su simpatía y le pidieron que no los juzgara por los actos de horror cometidos por otros. Cuando fue al hotel había estallado el caos y los reporteros querían su historia. Greg estaba inmerso en cuestiones políticas para las que no estaba allí. Debido a que estaba ayudando a los aldeanos, las autoridades lo interrogaron para averiguar por qué estaba allí.
Cuando Greg estaba buscando ayuda, nadie le dio la hora del día. Ahora estaba hablando con políticos y militares. Decidió mantener toda la financiación en el sector privado.
Se construyeron escuelas y las personas son una parte integral de su vida. Podemos aprender de sus experiencias para no juzgar a los demás y que suceden cosas buenas incluso en tiempos de lucha.